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| Foto: El Mexicano.com.mx |
Faltan días
para que el relevo del Arzobispo de Tijuana se de a conocer por el Vaticano.
Desde hace unos meses el Arzobispo Romo Muñoz viene maquinando una serie
de intenciones oscuras para encubrir todo lo relacionado con casos de pederastia
y homosexualidad que se han presentado bajo su mandato, la principal piedra en
el zapato de Romo se llama Eduardo Ortiz Alonso, quien a raíz de su denuncia en
el Vaticano el Arzobispo se molestó y está utilizando toda su maquinaria para
borrar a Ortiz del mapa.
Si
bien Ortiz con sus traumas y habilidades ha sobrellevado en soledad su firme
postura, el Arzobispo quiere en bandeja de plata la cabeza de Ortiz, y esto se
lo ha comentado a sus mas cercanos colaboradores, el objetivo es borrar del
mapa a Ortiz, ponerlo en mal con los Obispos de la región y con cuanto Obispo
sea necesario, para manchar su historial con el objetivo de desacreditarlo,
para que su denuncia no prospere.
¿Porque
hay tanto interés del Arzobispo en que Ortiz sea borrado del mapa? por la sencilla razón que las
acusaciones de Ortiz han tocado hilos sensibles que llegan hasta el mismo
Arzobispo y esto empañaría su "flamante" carrera episcopal, sobretodo
al final de su vida activa como obispo.
El
caso es tan complejo que involucra a sacerdotes de Tijuana y de Ensenada,
toda una red de homosexualidad clerical encubierta por el mismo Arzobispo,
quien tiene como secretario a uno de los líderes del lobby gay tijuanense. La
molestia de varios curas por la actitud cerrada del arzobispo entorno a los
curas acusados y que han sido absueltos ha molestado a más de un sacerdote de
la arquidiócesis, pero el obispo ha manejado con total hermetismo, para evitar
que esto se salga de las manos y que la investigación lo vincule.
Por
esa razón Romo Muñoz colocó al menos indicado como Vicario Judicial, al
Sacerdote homosexual y desequilibrado mental que tiene la encomienda
acabar canónicamente a Ortiz y todo aquel que quiera esclarecer la
verdad, por esa razón algunos sacerdotes de Tijuana cobardemente han preferido
callarse.
El
teatro que hizo en Tijuana el ahora emérito Arzobispo de Hermosillo fue montado
por el Nuncio Pierre y Romo Muñoz, los informes fueron maquillados y enviados a
Roma con la ayuda de Sacerdotes de Tijuana, Hermosillo y de la Nunciatura, sin
duda la corrupción crece, mientras Francisco se da baños de pobreza.
Tijuana
es una bomba de tiempo que ha sido silenciada por el mismo Romo, por
miedo y a la vez por ignorancia, por los casos que el protege y encubre,
a la larga le pueden traer problemas con la justicia civil. Por esa razón las
oscuras intenciones del Arzobispo son muy marcadas.
El padre Eduardo ortiz es tan encubridor como el mismo Obispo. Siendo rector del Seminario, el padre Eduardo protegìa a varios seminaristas de lo smismo que acusò a el Obispo. Soy testigo de ellos. Encubría, sobre todo, a Raúl Diaz, exseminarista.
ResponderEliminarestoy en total desacuerdo con esto, me parece de mal gusto que se realicen comentarios de la Iglesia y sus ministros sin pruebas, como decimos en Derecho con pruebas te podre creer, yo estuve 7 años y jamas mire comportamiento alguno de ningún ministro que ustedes están difamando, y antes de que me digan que no puedo defender lo indefendible, les diré que si ustedes me traen pruebas contundentes y verídicas de todo lo que hay dicho, seré el primero en tomar cartas sobre el asunto, porque no creo eso, saludos y espero respuesta favorable.
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