Padre Jesús de Luna |
Ubicada en el parque industrial Otay en Tijuana, su actual
párroco es el Sacerdote Jesús de Luna Torres quien fue formador y maestro del
Seminario. Forma parte del clero de Tijuana que gusta de la doble vida, por un
lado se presenta como un Párroco trabajador y entregado, ejemplo para muchos Seminaristas,
y por otro lado de doble vida gay, la
cual ya no es un secreto a voces entre los fieles de la parroquia. Sus días están
contados en esa comunidad, puesto que
será removido a la Parroquia de San José, ubicada en la Colonia Durango,
en lugar del Sacerdote Danilo.
A la Parroquia del Divino Maestro, conocida como la parroquia Universitaria
llegará el Sacerdote Héctor Emilio Nava, quien se ordenó para el clero de Mexicali
e incardinado a la arquidiócesis de Tijuana, protegido del Arzobispo Romo
Muñoz.
Héctor Emilio Nava es un Sacerdote que ha estado
siempre en la sombra, trabajando en el
Tribunal Arquidiocesano, apoyado y solapado por el Arzobispo y no con pocos enemigos en el
presbiterio, muchos Sacerdotes del clero tijuanense saben su manera de actuar,
quien dice luchar por el bien de la Iglesia pero muy a su estilo, había sido párroco
anteriormente y después vicario de la
Inmaculada, pero ahora que el enclenque Arzobispo esta por dejar el cargo lo ha
acomodado en la Parroquia universitaria, a sabiendas de su inestabilidad
emocional y que no tiene capacidad para dirigir una comunidad
debido a su estado de salud mental, cosa que debería de poner en alerta a la
comunidad. Quizá su mejor trabajo sea en la oficina, atendiendo los diversos casos del Tribunal, algo que
disfruta, y anhela ser el titular del mismo.
Padre Hector Emilio Nava |
La pobre comunidad soporto por mas de diez años al Sacerdote
Javier Sánchez, hoy párroco de Niño Jesús de Praga, quien prácticamente dejo en la ruina económica
a la parroquia gracias a sus despilfarros, falta de organización y a sus amoríos
gays con jovencitos a quienes financiaba sus excesivos gustos con dinero de los
fieles, gracias a sus placeres sexuales con los que era reconfortado, lo mismo
paso con De Luna, quien llevando su homosexualidad discretamente gastaba dinero de la parroquia con sus
amantes en San Diego.
Pobre de los feligreses de esta comunidad, tienen dos
semanas para revelarse y pedir un
Sacerdote santo y entregado, lo merecen.