Según los conocimientos, competencia y posición de que gozan, los fieles tienen el derecho e incluso a veces el deber de manifestar a los Pastores su opinión sobre cuestiones que pertenecen al bien de la Iglesia, y también tienen derecho a hacer conocer su opinión a los demás fieles cristianos , con el debido respeto a la integridad de la fe y la moral y a la reverencia hacia sus pastores, y con la consideración por el bien común y la dignidad de las personas. [CIC, Codex Iuris Canonicus (1983), Can. 212, § 3.]

jueves, 22 de agosto de 2013

CRISIS DE VOCACIONES, GRACIAS A LA INEPTITUD DEL ARZOBISPO

El número de seminaristas ha disminuido en los  últimos años. La promoción vocacional de la arquidiócesis  aunque ha tratado de hacer su trabajo  se ha dado cuenta que los jóvenes no les interesa la vida sacerdotal. Uno de los factores importantes es el testimonio de los Sacerdotes, que no motiva a ingresar. Y otro factor importante es que ya estando dentro del Seminario se dan cuenta de la situación que se vive dentro.
El Obispo siempre ha manifestado por tener cantidad, más que calidad en el Seminario, pero no ha podido mantener un Seminario digno de ejemplo en toda la región. De por si el Seminario de Tijuana  ha tenido una mala fama a nivel nacional, ahora está en la decadencia.

¿Quién es el culpable de esta situación que vive el corazón de la Diócesis? El Obispo, quien con su mediocridad, su falta de liderazgo, su carácter débil no ha podido, no ha sabido, es mas no ha hecho nada por mejorar la situación que vive esta Iglesia particular.


La situación que vive Tijuana es tan delicada que urge atraer la atención del Vaticano, tal como lo están tratando de hacer un grupo de laicos, para que se intervenga, al Obispo se le destituya y se empiece a hacer una limpia de todo el presbiterio, sobretodo en el Seminario, en la Curia y en una que otra Parroquia.